sábado, 15 de septiembre de 2012

ACTUALIDAD ASTRONÓMICA. TRITÓN


¿Se oculta en Tritón un océano subterráneo?
Tritón

Con un diámetro de 2700 km, el frío y rugoso Tritón es la mayor luna de Neptuno y la séptima más grande del Sistema Solar. Orbita de forma retrógrada a su planeta, es decir, en dirección opuesta a la rotación de Neptuno, siendo la única luna de gran tamaño que lo hace,  lo que induce a pensar a los astrónomos que Tritón es en realidad un objeto capturado procedente del cinturón de Kuiper que fue capturado por Neptuno en algún momento de la historia de nuestro Sistema Solar con casi 4,7 mil millones de años de existencia.
Tras una breve visita realizada por el Voyager 2 a finales de agosto de 1989, Tritón se nos mostró con un curioso moteado y una superficie reflectante, estando casi la mitad cubierta por un terreno accidentado “que recuerda a un melón”,  cuya corteza está compuesta principalmente por hielo de agua que envuelve a un núcleo de roca metálica, pero los investigadores de la Universidad de Maryland han sugerido que entre el hielo y la zona rocosa puede esconderse un océano de agua, que se mantendría líquido a pesar de las temperaturas de -97 ºC que se suponen que posee, convirtiendo a Tritón en otra luna con un mar subterráneo.
Superficie de Tritón.

Pero, ¿cómo un mundo tan frío podría sustentar un océano de agua líquida en su interior durante tanto tiempo? Pues en parte, la presencia de amoníaco  en su interior podría contribuir apreciablemente a disminuir el punto de congelación del agua haciendo que nunca se congelase el muy frío océano subterráneo.
Además de esto, Tritón puede tener una o varias fuentes de calor interno. Cuando Tritón fue capturado por la gravedad de Neptuno, su órbita pudo haber sido inicialmente muy elíptica y haber estado sometida la luna a intensas fuerzas de marea que habrían generado calor debido a la fricción. Aunque con el tiempo, la órbita de Tritón alrededor de Neptuno se ha hecho casi circular debido a las pérdidas de energía causadas por esas fuerzas de marea, el calor podría haber sido suficiente para llegar a fundir una cantidad considerable del hielo de agua atrapada debajo de la corteza de Tritón.

Recreación de Neptuno y Tritón de imágenes tomadas por la sonda Voyager 2 en Agosto de 1989.

Otra posible fuente de calor podría ser la desintegración de isótopos radiactivos, un proceso en curso que podría estar calentando el planeta durante miles de millones de años. Aunque no es suficiente para descongelar todo un océano, combinado con el calor radiogénico y el de calentamiento por las fuerzas de marea, podría haber contribuido a mantener una delgada capa oceánica rica en amoníaco debajo de una corteza congelada que le sirve de aislante durante un tiempo muy largo, aunque finalmente, también terminaría enfriándose y congelándose al igual que el resto de la luna. Cualquiera que sea lo que haya sucedido o esté ocurriendo, aún está por verse ya que todavía existen incógnitas por resolver.
“Creo que es muy probable que en Tritón exista un océano subterráneo rico en amoníaco” ha manifestado Saswata Hier-Majumder del Departamento de Geología de la  Universidad de Maryland, que junto con sus colaboradores ha publicado su investigación en la revista Icarus en el mes de Agosto  pero aún subsisten una serie de incertidumbres en el conocimiento del interior de Tritón y de su pasado, que hacen muy difícil asegurarlo con absoluta certeza”.

 Recreación Cinturón Kuiper.

Aun así, cualquier aseveración de la existencia de agua líquida en grandes cantidades en cualquier planeta debería hacerse notar, ya que es en este tipo de entornos donde los científicos creen que se encuentran las mayores posibilidades de encontrar cualquier forma de vida extraterrestre. Incluso en los confines más remotos del Sistema Solar, desde los planetas hasta sus lunas, en el Cinturón de Kuiper e incluso más allá, si hay fuentes de calor, agua líquida y los elementos adecuados (los cuales están apareciendo en los lugares más inesperados), las etapas de la vida pueden haberse afianzado.


Pueden obtener más información en:

Traducción: Pedro Díaz


No hay comentarios:

Publicar un comentario