jueves, 31 de enero de 2013

EL SISTEMA SOLAR EN FEBRERO 2013


DINÁMICA PLANETARIA



 Mercurio: Solo será visible y con dificultad en el horizonte oeste en los atardeceres  de mediados de mes. El planeta alcanzará su máxima elongación del Sol (más de 18º al este)  el día 16; este día  Mercurio se ocultará una hora y media después del Sol.
Mercurio se encontrará el día 1 en la constelación de Capricornio, pasará a la de Acuario el día 4 y el 19 entrará en la de Piscis.

Venus: Después de muchos meses de ser la estrella matutina, este mes  será prácticamente indetectable pues se elevará justo antes que el Sol, con el cual estará en conjunción superior para  final del mes que viene. Tendremos que esperar hasta el mes de Abril para ver de nuevo al planeta, pero ya convertido en lucero vespertino.
Venus comenzará el mes en la constelación de Sagitario y el día 2 pasará a la de Capricornio para atravesarla completamente y entrar en la de Acuario el día 24.                                   

Marte: Continuará igual que en los meses anteriores: su posición cercana al horizonte oeste, hace casi imposible su observación. Esta dificultad nos hará perdernos una bonita conjunción: el cruce con Mercurio en el atardecer del día 8 cuando ambos planetas estarán separados por  tan solo 15’ minutos de arco.
Durante todo el mes de febrero, el planeta se moverá dentro de la constelación de Acuario, acercándose al  límite de la constelación de Piscis.

 Júpiter: Es la “estrella” más brillante de la noche desde la puesta del Sol, lo podremos observar muy alto en el cielo hasta su ocaso por el horizonte oeste ya avanzada la madrugada. Cada día su tiempo de visibilidad tiende a disminuir, adelantando su ocaso en  unos 4 minutos.
Júpiter continúa en la constelación de Tauro, entre  la estrella Aldebarán y las Pléyades.


                                                    
Saturno: Al contrario que Júpiter, su tiempo de observación irá  aumentando cada día y  su salida  se anticipará también en unos 4 minutos.  Para finales de este mes el planeta ya aparecerá en el horizonte este alrededor de la medianoche. Así pues, su ascenso en el cielo será posible observarlo durante  la segunda mitad de la noche hasta que la salida del Sol lo oculte con su brillo.
Saturno permanecerá todo el mes en la constelación de Libra, el día 19 invertirá su movimiento de avance en el cielo, que se volverá retrógrado; el planeta desde ese día empezará su aproximación a la constelación de Virgo en la que ingresará a mediados de Mayo.

 Urano: Será visible después de la puesta del Sol, en su camino hacia el ocaso y acercándose cada día un poco más a su conjunción superior con el astro rey,  efeméride que se producirá a finales de Marzo.
Urano se encontrará todo el mes en la constelación de Piscis cerca del límite de la constelación de Cetus. Como decimos en nuestra información de  cada mes, el brillo de Urano se encuentra al límite de visibilidad del ojo desnudo y  para una buena observación se requiere el uso de un telescopio.

CONJUNCIONES INTERESANTES PARA OBSERVAR Y FOTOGRAFIAR


Luna - Saturno. Al empezar la madrugada del 3 de febrero, la Luna en  cuarto menguante aparecerá en el horizonte este junto con Saturno. En las horas siguientes  los dos astros irán elevándose más y más sobre el horizonte, hasta que la luz del amanecer los oculte a nuestra vista.

 Luna - Venus. Una interesante conjunción pero difícil de ver: el día 9 justo antes de la salida del Sol, en el horizonte este podremos contemplar la salida de una fina Luna en fase de cuarto menguante (dos días antes de Luna Nueva)   seguida en su ascenso por el planeta Venus.

 Luna - Marte - Mercurio: Otro reto: una conjunción de tres astros que tampoco será fácil de observar, pero merecerá el esfuerzo de intentarlo. El día 11 pocos minutos después de la puesta del Sol y en el horizonte oeste, la Luna en su primer día de creciente, aparecerá finamente iluminada en su parte sur,  dándole forma de un barco celeste precedida por los planetas Mercurio y Marte. Dada la escasa elevación sobre el horizonte de estos dos planetas, deberemos tener un horizonte limpio para su observación.


 Luna - Júpiter - Pléyades: En las primeras horas de las noches del 17 y 18, la Luna al igual que en meses anteriores, al cruzar la constelación de Tauro nos brindará junto a las Pléyades, Híades y Júpiter dos bonitas conjunciones.



Urano - 44 Piscis, Los días 25 y 26 serán los de más proximidad de Urano con la estrella 44 Piscis de magnitud 5.75  con la cual formará pareja, la distancia entre ambos astros será de tan solo 4’ minutos de arco.
El color amarillo de la estrella 44 Piscis  junto al color azul de Urano será una bonita imagen para  observar en nuestros telescopios.
Hasta el próximo mes, buena suerte y cielos claros.

Texto: Paco Tello
Mapas: Stellarium

domingo, 27 de enero de 2013

LOS SATÉLITES GALILEANOS


Seguimos con una nueva entrega de nuestra sección: Astronomía para gente corriente. situada a la derecha del blog.
En esta entrega, nuestra compañera María José Maraver nos  habla de los cuatro satélites principales de Júpiter, su fisonomía, su tiempo orbital y otros datos de interés.

miércoles, 23 de enero de 2013

CONOCIENDO OTRO CIELO (1)

NIVEL 1: EL CIELO CON PRISMÁTICOS-

El ansia de observar  objetos de cielo profundo de magnitudes y tamaños “imposibles” con nuestros telescopios,  ha provocado en gran parte, que nos olvidemos del inmenso placer que representa contemplar el cielo a través de unos sencillos prismáticos.


Damos comienzo a esta nueva sección de trastear el cielo con prismáticos. En este primer artículo y los siguientes, iremos describiendo una serie de objetos de cielo profundo que seguramente no  dejarán indiferentes a nadie.
Empezamos nuestro particular viaje y vamos a  dirigir nuestros prismáticos  hacia la estrella más brillante del cielo nocturno: Sirio, estrella que nos servirá de guía para localizar fácilmente la constelación de Can Mayor, nuestro primer destino.
Can Mayor se encuentra ubicada al sur del ecuador celeste, es una constelación rica en estrellas y objetos de cielo profundo; ideal para los observadores situados en latitudes tropicales y el hemisferio Sur. 
Constelación de Can Mayor
Comenzamos con una nota aclaratoria: en este primer nivel de CONOCIENDO EL CIELO, nos vamos a centrar en los cúmulos abiertos del catálogo Collinder,  que será nuestra principal fuente de consulta a lo largo de todos los artículos.
Las iniciales Cr que antecede a cada número, es la abreviatura del nombre de su autor, el astrónomo sueco Per Arne Collinder, que realizó un catálogo de 471 objetos en 1931. Al final de la descripción de cada cúmulo se indicará su forma o composición comparándola con la de otros cúmulos conocidos para que sea  más fácil su identificación, tomando como referencia los siguientes:
  • ·        Pléyades (M45)
  • ·        Pesebre (M44)
  • ·        NGC 6169 en la constelación de Norma (Regla) abierto y poco denso
  • ·        Globular
  • ·        Cadena como asterismo
  • ·        Nebuloso, o contiene nebulosidad

Recordamos que el tamaño de los cúmulos se dan en minutos de arco y puede servir de referencia el de la luna llena que es de 30’ minutos de arco.
Teniendo siempre presente esta nota,  vamos pues con nuestros tres primeros cúmulos:
Cr. 121, Cr. 132 y Cr. 140.


Cr 121.
A 4.5º grados al norte de la estrella supergigante azul épsilon CMa, Adhara, de magnitud 1.50 y centrado en la supergigante naranja Ómicron 1 de magnitud 3.85,   tenemos este precioso cúmulo abierto con una magnitud global de 2.6, compuesto por unas 20 estrellas de las cuales podemos apreciar fácilmente 10. El cúmulo tiene un tamaño de 50’ minutos de arco y se encuentra a una distancia de 3.300 años luz.

Campo visión y Cr.121
Destaca sobre todas la estrella Ómicron1: una supergigante 530 veces mayor que nuestro Sol. Las  tres estrellas que en línea casi recta cruzan el cúmulo de norte a sur, son:
  • ·        HIP 33165 de magnitud 6.65 de color blanco-verdoso y es la situada más al norte,
  • ·        HIP 33126 de magnitud 6.20 y color blanco se encuentra por debajo de Ómicron1
  • ·        HIP 33081 de magnitud 6.50 de color blanco al sur del cúmulo.                                      Este cúmulo se asemeja a las Pléyades.


Cúmulo Cr. 121
Dentro de la zona de visión de nuestros prismáticos que abarca un campo de poco más de 4º grados y fuera del cúmulo, podremos observar situadas en la zona derecha (oeste) dos estrellas: HIP 32744 de magnitud 6.50 de color blanco y HIP 32729 de magnitud 7.10; ambas son dos sistemas triples imposibles de resolver con  prismáticos.
En la zona izquierda (este del cúmulo) brilla con magnitud 3 la estrella Ómicron2 una supergigante azul  que se encuentra a 2.568 años luz de nuestro Sol.

Ahora bajaremos un poco hacia el sur de Can  Mayor y dentro del  campo de visión de nuestros prismáticos encontraremos estos dos cúmulos Cr. 132 y Cr. 140
Campo visión y Cr.132 y Cr. 140

Cr.132
Se encuentra a 2.45º grados al oeste de la estrella eta CMa, Aludra de magnitud 2.45. Tiene un gran tamaño: 95’ minutos de arco y contiene unas 25 estrellas; la magnitud del conjunto es de 3.2
Destaca dentro del cúmulo la estrella HIP 35083 de color blanco azulado con una magnitud de 5.35 que se encuentra a una distancia de 645 años luz y le sigue en brillo la estrella HIP 34782 de magnitud 6.10 y de color blanco que se encuentra a 155 años luz. Junto con otras estrellas de magnitudes por debajo de 7  tiene la apariencia de un conjunto similar a las Pléyades.
Cúmulos Cr. 132 y Cr. 140
Cr.140. 
Cúmulo que posiblemente fuera descubierto por Nicolas L. Lacaille en 1751-52 desde Sudáfrica (por la descripción que hace de él), pero los datos de situación son erróneos y realmente se encuentra a  2º grados más al norte. Per Collinder lo catalogó en 1931.
Es un cúmulo abierto bastante grande con un tamaño de 42’ minutos de arco de diámetro y contiene unas 30 estrellas, con una magnitud visual de 3.5. .El color predominante de sus estrellas es el azul. En su interior la estrella HIP 35957, es una bonita doble recogida también como Dunlop 47,  de color anaranjado la principal y magnitud 5.30 y de color azul la secundaria, de magnitud 7.55 con una separación asequible con los prismáticos si tenemos buen pulso.
Por su disposición, a este cúmulo se le conoce como el penacho de la cola del perro y  su forma, al igual que los dos anteriores es similar a las Pléyades.
Fuera del cúmulo a 1.5º al este,  brilla la estrella HIP 36514 de magnitud 4.65 de color amarillento similar nuestro Sol y la estrella HIP 36362 de color blanco azulado de magnitud 5.75.

Esperamos que esta sección sea de vuestro agradado y podáis disfrutar de otra bonita y diferente  manera de ir conociendo el cielo con prismáticos.

Hasta la próxima.

Texto: Paco Tello
Mapas: Stellarium

sábado, 19 de enero de 2013

CONSTELACIONES PARA EL RECUERDO (IX)

RAMUS POMIFER- CERBERUS-

En esta nueva entrega de las constelaciones para el recuerdo, nos situamos en la región del cielo que se encuentra  entre las constelaciones de Hércules y Lyra. Aquí  se creó una constelación a la cual cambiaron el diseño en un par de ocasiones, luego la fusionaron  en una sola, y finalmente la hicieron desaparecer.
En 1603 Johann Bayer publicó su gran obra Uranometría, y en la placa número 7 dedicada a la constelación de Hércules (grabada preciosamente por Alexander Mair) podemos ver como el héroe griego, lleva cogida en su mano derecha una rama del árbol de las manzanas de oro que había robado del Jardín de las Tres Hespérides dando cumplimiento así al trabajo número once que le impuso la diosa Hera.


Johannes Hevelius en 1690, publica su Firmamentum Sobiescianum, y en la placa dedicada a Hércules introduce la constelación de Cerberus, tomando para su creación estrellas de la misma zona que Bayer.
Hevelius sin embargo sustituyó  la rama del manzano por tres serpientes, recordando así el trabajo número 12 realizado por Hércules (aunque según la leyenda,  fueron  dos las serpientes que Hera le puso en la cuna);  además  cambió la imagen de Cerberus, el perro mitológico de tres cabezas que guardaba las puertas del inframundo de Hades y también la mano que las aprisiona, que pasó de la derecha a la izquierda.

En 1712 ocurre una lamentable historia entre John Flamsteed, primer astrónomo real británico,  Isaac Newton (presidente por esa fecha de la Royal Society)  y  Edmund Halley.
Flamsteed tenía encomendada la labor de realizar con la mayor exactitud posible las posiciones de las estrellas para perfeccionar la navegación por mar, tarea en la cual llevaba trabajando más de 35 años,  cuando Newton con la ayuda de Halley se “apropiaron” de gran parte de sus registros engañándolo con un edicto “manipulado” del Rey y publicaron un Atlas Celeste, sin mencionar ni reconocer el laborioso trabajo de Flamsteed. Como venganza unos años más tarde, Flamsteed  compró la mayor parte de los atlas editados para posteriormente quemarlos  delante del Royal Observatory de Greenwich, dando así por satisfecha la afrenta recibida.
En el Atlas de Newton y Halley, el inglés grabador John Senex, amigo personal de Halley, combinó  por primera vez las constelaciones de Ramus y Cerberus, donde las serpientes envuelven la rama del manzano.
En 1719 fallece John Flamsteed y en 1725 se publicó póstumamente su gran obra bajo  el título de Historia Coelestis Britannica, donde aparece Hércules dibujado por el pintor James Thornhill, con la mano izquierda desnuda de ramo y serpiente.
No fue hasta la década de 1770 cuando en el Atlas Coelestis de  Fortin-Flamsteed, apareció  otra vez en la mano de Hércules las dos constelaciones  Ramus y Cerberus.



John Elert Bode en sus atlas de 1782 y 1805 continuó con la figura de las dos constelaciones como podemos ver en su placa de Uranographia 


Alexander Jamieson  en su Celestial Atlas de 1822, y Richard Rouse Bloxam en el Espejo de Urania de 1825, la rotularon con el nombre de  Cerberus et Ramus Pomífer. De esta forma siguió recogida en posteriores atlas  hasta su desaparición en 1930 y sus estrellas devueltas a la constelación de Hércules.


Sin embargo y para que conste que no hay nada nuevo bajo el cielo, hemos encontrado un grabado que representa a Hércules  entrando en el Jardín de las Hespérides para robar del árbol las manzanas de oro; se observa que curiosamente este árbol estaba protegido por una serpiente enroscada en su tronco. Este grabado  datado en 1488  y realizado por el veneciano Higinio constata que Bayer y Hevelius posiblemente bebieran de fuentes renacentistas que inspiraron sus diseños…

Hasta la próxima.
Texto: Paco Tello.

miércoles, 16 de enero de 2013

INTRODUCCION A LA NUEVA SECCIÓN: CONOCIENDO OTRO CIELO.


Todas las galaxias, nebulosas y cúmulos de estrellas descubiertos hasta el momento, se denominan objetos de cielo profundo OCP.
De todos los catálogos existentes  el  más  popular para la mayoría de los aficionados a la astronomía , es el  confeccionado en 1774 por el astrónomo francés Charles Messier: un listado de 110 objetos sobradamente conocido, pero el más completo es el Nuevo Catálogo General de Nebulosas y los Racimos de Estrellas, conocido con las iniciales  NGC, creado por John Louis Emil Dreyer en la década de 1880, a este primer catálogo se le han sumado los nuevos descubrimientos realizados desde esa fecha y que han sido recogidos en dos suplementos, con el nombre de IC I e IC II, (Index Catalogo) Hoy día resulta abrumador el número de objetos de cielo profundo registrados. En este catálogo NGC se incluyen  los 110 objetos Messier.
Bajo el título CONOCIENDO OTRO CIELO,  próximamente vamos a dar  comienzo una nueva serie de artículos, donde iremos sugiriendo la observación de objetos de cielo profundo, en su mayoría cúmulos abiertos, que no se encuentran recogidos en este inmenso catálogo NGC/IC.
Para la observación de estos cúmulos  no necesitaremos la ayuda de telescopio alguno: estos objetos que iremos describiendo tienen la particularidad de mostrarnos toda su belleza a través  de unos sencillos prismáticos, ilustrando el artículo con un mapa de su situación en el cielo y sus  características.
Si salimos al campo en una noche oscura y despejada, a simple vista podremos ver entre 1.500 y 2000 estrellas. Si tenemos buena vista, alcanzaremos a ver estrellas de hasta la magnitud 5.5 o 6, pero si nos ayudamos con  unos prismáticos, bien de 7 x 35 o de 10 x 50, (este último más recomendable), el número de estrellas crecerá exponencialmente y podremos llegar a ver decenas de miles, ya que alcanzaremos fácilmente estrellas de las magnitudes 9 y 10.
Este es el principal objetivo de nuestra nueva sección; en cada artículo os propondremos una mirada a esos puntos brillantes del cielo que al ser contemplados a través de unos prismáticos resultarán todo un descubrimiento. Un espectacular nuevo cielo nos espera para que lo disfrutemos ¿….nos acompañáis?

sábado, 12 de enero de 2013

DIOSES, MITOS Y ETIMOLOGÍA LUNAR- LAS LUNAS DE SATURNO (2)

Helena y Paris

Navegamos de nuevo por los alrededores de este coloso espacial y sus lunas descubriendo todo un rico mundo de fantasía, plagado de simbolismo.

Las diferentes lunas que saldrán a nuestro paso en esta ocasión, continuarán la saga de los titanes y gigantes, dioses y seres fantásticos con los que se relacionaban los mortales, y a éstos últimos.

Con esta nueva entrega de la saga esperamos que paséis unos momentos divertidos y mágicos, donde vuestra imaginación se abra en toda su extensión y permita visualizar todo el colorido, la fuerza y la energía que intentaron transmitir los autores de estos relatos.

Os dejamos ahora inmersos en el particular universo de las lunas de Saturno, buen viaje...

Texto artículo:  Alfredo García.

lunes, 7 de enero de 2013

4 JOYAS PARA VER EN EL CIELO DE ENERO 2013

Comenzamos un nuevo año y  nuestra sugerencia de Enero, consiste en una galaxia espiral dentro de un cúmulo de galaxias tapada en gran parte por nuestra Vía Láctea, un precioso y poco conocido cúmulo abierto con nebulosidad similar a las Pléyades, un cúmulo de la lista Messier  y un sencillo asterismo para quienes empiezan a observar.

NGC 2613 Galaxia espiral en la constelación de Pixys.
AR.: 08h 33m 58s Dec.: -23º 00’ 42’’ Magnitud: 10.40 Tamaño: 7.6’ x 1.9’
Nuestra primera sugerencia se localiza trazando una línea imaginaria que partiría desde  la estrella,  Xi  Azmidiske de magnitud 3.30, pasaría por la estrella de magnitud  2,8 Rho Turei,  (ambas estrellas de la vecina constelación de Puppis, Popa) y la seguiríamos prolongando  hasta una distancia de 6º grados al este de Rho Turei, donde la encontraremos.


NGC 2613 se encuentra a unos  60 millones de años luz, y su observación  presenta cierta dificultad por su tamaño y brillo. A través de un telescopio de 10” pulgadas y con un ocular que nos proporcione 200x, aparecerá como una nebulosa con un centro ligeramente más brillante. Su forma es similar a nuestra Vía Láctea. 

En esta preciosa imagen tomada desde el observatorio de la Silla en Chile podemos apreciar toda su belleza.
Esta galaxia corresponde a un cúmulo de galaxias llamado Concentración de Puppis, a la que pertenece también NGC 2559. Aunque este grupo tiene una densidad que podemos comparar con la del Cúmulo de Virgo, nuestra propia Vía Láctea bloquea la luz de la mayoría de sus miembros.

Vamos con la segunda sugerencia
NGC 2547  Cúmulo abierto en la Constelación de Vela
A.R.: 08h 11m 5s  Dec.: -49º 18’ 21’’ Magnitud: 4.7 Tamaño: 20’
Este cúmulo fue descubierto por el abad Nicolás L. Lacalle el 15 Febrero de 1752, durante su estancia en el Cabo de Buena Esperanza, y se encuentra a unos 1.500 años luz de distancia.
Es un precioso cúmulo abierto que los aficionados situados en el Hemisferio Norte  tenemos pocas oportunidades de ver al encontrarse muy bajo en el horizonte: se  tendría que combinar el lugar de observación con un buen cielo y  baja contaminación  lumínica, algo difícil por desgracia de conseguir. Sin embargo NGC 2547 es fácilmente visible a simple vista desde un lugar oscuro en latitudes más bajas.
Se localiza  a 1º grado 50’ minutos al sur  de la estrella de magnitud 1,80  Gamma Velorum Regor.

               

Este cúmulo lo componen unas 80 estrellas, muchas de ellas forman cadenas y lazos. 
Esta imagen nos ofrece la visión de una tenue nebulosidad que lo envuelve y que recuerda al cúmulo de las Pléyades.
Con cualquier pequeño telescopio se podrá ver una docena de estrellas; la más brillante del cúmulo es HIP 40016/HD 68478 de magnitud 6,5 una gigante azul situada a unos 1.300 años luz de distancia y que se encuentra justo al este del centro del cúmulo.

A NGC 2547 también se le conoce con el nombre común de El pendiente de oro, y fue Stephen James O'Meara editor y colaborador de la famosa Revista Astronomy, quien lo bautizó con este nombre basándose en un dibujo realizado por el astrónomo James Dunlop ya que le recordaba a un pendiente que cuelga de la oreja de un pirata. Imaginación no nos falta….

Nuestra tercera sugerencia.
M 48 (NGC 2548) Cúmulo abierto en la Constelación Hydra
A.R.: 08 h 14m 27s Dec: -5º 50’ 24’’ Magnitud: 5.80 Tamaño: 54’  minutos de arco.
Este cumulo fue descubierto por Charles Messier el 19 de Febrero de 1771, tiene una edad aproximada de 300 millones de años y se encuentra a una distancia estimada  de 2.000 años luz, según Sky Catalog 2000.  
M 48 Se localiza a tan solo 35’ minutos de la frontera  de Hydra con la constelación de Monoceros, y a  3º grados al sur-sureste de la estrella de magnitud 4,4 Zeta (z) Monocerotis.
Este cúmulo es visible a simple vista bajo buenas condiciones de observación desde un sitio oscuro. 


Con prismáticos y pequeños telescopios podremos resolver un par de docenas de sus estrellas más brillantes esparcidas en un campo de 1º grado del cielo, con telescopio de 6” pulgadas resolveremos unas 50 estrellas y  si aumentamos la ampliación, este número se incrementará hasta las 80. El núcleo más denso se extiende unos 30’ minutos de arco, mientras que incluyendo las estrellas más exteriores llega a alcanzar hasta los 54’ minutos de arco.


Lo más destacado de este cúmulo es una cadena de estrellas en zigzag de 9 º y  de 10 º magnitud,  que va desde el norte al sur  a través del centro del cúmulo.

Para nuestra última sugerencia no tendremos que movernos mucho, pues es un asterismo en la misma constelación y que es un comienzo bueno y bonito para los aficionados que se inician en la observación.
La Cabeza de Hydra. Marca la parte más occidental de la mayor constelación del cielo con un área de 1.303º grados cuadrados y se localiza a 28’ minutos de arco al sur del punto medio de una línea imaginaria que uniera la estrella  Procyon, Alfa de Can Menor y la estrella  Régulo, Alfa de Leo


Este asterismo es visible a simple vista, sin especiales condiciones de oscuridad.
Son seis las estrellas que lo conforman y empezaremos por la más brillante: Zeta Hydrae de magnitud 3,1  gigante amarilla que se halla a una distancia de 151 años luz; a 1º grado 43’ minutos  al oeste nos encontraremos con la estrella Rho Hydrae de magnitud 4,35 una subgigante azul situada a 354 años luz de distancia y que es el componente principal de un sistema múltiple.
Siguiendo el recorrido, muy cerca a tan solo 42’ minutos de arco  al norte de Rho,  brilla la estrella Épsilon Hydrae, otra gigante amarilla de magnitud 3.38, que se encuentra a 129 años luz de distancia y  a 2º grados 22 minutos hacia oeste  encontraremos a  Delta Hydrae, estrella blanca de magnitud 4.14 y componente principal de otro sistema múltiple de estrellas.
Ahora bajaremos una distancia igual de 2º grados 22’ minutos hacia el suroeste para llegar a  Sigma Hydrae de nombre Al Minliar Al Shuja (la nariz de la serpiente) estrella gigante naranja de magnitud 4.45 y situada a 353 años luz, y ya haremos un último  giro  hacia el este de 1º grado 6’ minutos  para llegar a la sexta y última estrella de este colorido asterismo, Eta Hydrae subgigante azul de magnitud 4.30 y la más distante de todas, pues se encuentra a 585 años luz de nuestro sistema solar.

Hasta el próximo mes, buenos cielos y mucha suerte.


Texto: Paco Tello
Mapas: Stellarium

miércoles, 2 de enero de 2013

LLUVIA DE METEOROS CUADRÁNTIDAS 2013

CUADRÁNTIDAS 2013

Desde el pasado 28 Diciembre de 2012 y hasta el 7 Enero de 2013, nos encontramos en otro periodo de lluvia de meteoros: las Cuadrántidas



El origen
No se conoce con exactitud el origen de esta lluvia, pero en el mes de diciembre de 2003 Peter Jenniskens del Centro de Investigación Ames de la NASA, pudo determinar la posible procedencia de esta lluvia de meteoros; según el investigador, ésta son los restos del asteroide 2003 EH1 o planeta menor 196256, la misma fuente de las Gemínidas y que a su vez este asteroide fue parte del cometa ya extinto C/1490 Y1.
 La tierra cruza la órbita de este cuerpo celeste perpendicularmente, lo que hace que esta lluvia de meteoros sea muy rápida. Entre 1820 y 1830 los observadores del  cielo fueron notando un incremento  en los primeros días de cada año, de caída de meteoros y con el paso de los años ya en 1839 constataron  que  esta lluvia resultaba ser periódica.
Así, la primera vista registrada de las Cuadrántidas ocurrió el 2 de enero de 1825 efectuada por Antonio Brucalassi en Italia; el mismo día 2 de enero, pero del año 1835 esta lluvia de meteoros fue observada por Louis François Wartmann en Suiza.  Sin embargo no fue hasta 1839 cuando  se sugirió que el fenómeno podría ser anual, Adolphe Quetelet del Observatorio de Bruselas y Edward C. Herrick (Connecticut), independientemente el uno del otro, lo hicieron después  de estudiar el fenómeno durante un tiempo. Ya en 1863 Stillman Masterman propone un posible origen de esta lluvia de meteoros.


 La lluvia
Esta lluvia junto a las Gemínidas son de las más activas del año. A pesar de no gozar de tanta popularidad como las Perseidas, no debemos dejar de pasar por alto la superior particularidad de estas lluvias por la duración de los trazos en el cielo, de 3 a 4 segundos y su tasa/horaria puede llegar a los 120 meteoros hora (Variable entre 60/200)
Para la madrugada del día 3 al 4 Enero y poco antes de amanecer se espera su  pico máximo. Su actividad se encuentra muy concentrada en ese momento, siendo los meteoritos muy numerosos y brillantes, mientras que en los días previos o posteriores su tasa horaria y visibilidad es muy pobre.
La velocidad geocéntrica de estos meteoros es moderada, unos 41 Km/segundo.


La observación
Esta lluvia de meteoros, como  todas las lluvias, lleva el nombre de la constelación donde se sitúa su radiante. En este caso la singularidad que la caracteriza es que  la constelación  Quadrans Muralis (del latín Cuadrante del Muro) en la cual se sitúa el radiante, ya no existe, y sus estrellas han sido unificadas en la constelación de El Pastor (Boyero)
En la noche del pico máximo, la Luna desde su salida y situada al oeste del radiante  estará iluminando el cielo aproximadamente con un 61% de su superficie, dificultando en un buen porcentaje la visibilidad de los meteoros, sobre todo los más débiles.
Nuestras recomendaciones como es habitual para este tipo de efemérides son:
  • Alejarse de cualquier núcleo urbano. Buscar un lugar lo más oscuro posible, libre de fuentes de iluminación que puedan dificultar la visión de los meteoros.
  • Acomodar nuestra visión a la oscuridad. Para ello, necesitaremos un tiempo no inferior a 15 minutos para que la pupila se adapte convenientemente.
  • Ponerse cómodo. Si la zona elegida para observar lo permite, tumbarse en el suelo sobre un saco de dormir o una manta, o bien sentarse sobre una silla reclinable y sobre todo no olvidarse de  llevar buena ropa de abrigo, pues estas  noches  son muy frías.
  • Llevar algo de comida y bebidas calientes.
  • No usar prismáticos ni telescopios. A simple vista se observará  mejor, pues tendremos más campo de visión.

Texto: Paco Tello