viernes, 19 de agosto de 2016

AMIGOS, ESTRELLAS Y MUCHO MAS EN LA PICOTA

Por Luis Viana


Desde que comencé hace un tiempo a observar dobles no he parado y junto al repaso que hago en cada salida de algunas constelaciones para seguir memorizando su forma y colocarlas unas juntas a otras fue como transcurrió mi noche.

Empecemos por el principio, llegué a la Picota a eso de las 21:15 y aparqué mi coche en situación estratégica para colocar mi equipo y me puse a saludar a los amigos, que por cierto esta noche había una buena representación de ellos, lo cual siempre alegra mucho. Acto seguido monté mi telescopio Celestron y  tras la habitual  foto de grupo y mientras llegaba la oscuridad paseé para hablar con la gente y compartir ese momento mágico del vinito de Paco (llamado coloquialmente, dilatador de pupila) y la repostería que nos prepara su esposa María José.


Sobre las 22:15 comencé con la alineación de mi CPC y una vez  conseguida me senté en mi silla y me dispuse a reconocer un buen número de constelaciones y a situarlas unas junto a otras, esto es una labor que recomiendo encarecidamente a todos los principiantes para ir aprendiendo y reconociendo su situación en el cielo. El número de constelaciones que repasé en esta noche fue bastante grande, un total de 27. Comencé por el Boyero, Corona Boreal, Hércules, Virgo, Libra, Escorpio, Sagitario, Ofiuco, Serpiente, Lira, Águila, Cisne, Escudo, Perros de Caza, Cabellera Berenice, Sagitta, Delfín, Caballito, Zorra, Cefeo y Dragón. Más tarde, sobre las 00:30 hice un parón para reconocer y colocar Capricornio, Acuario, Pegaso, Andrómeda, Triángulo y Perseo.

Ya metido en observación y con mi ocular Ethos de 17mm  fui a Hércules para una vez más admirar los dos cúmulos más importantes como son M13, impresionante como siempre, y M92; para a continuación comenzar con las dobles de Hércules y que ya me ocupó el resto de la noche.

Algunas de las dobles observadas fueron: K Her, 49 Her, 37 Her, así hasta un total de 14 dobles; si bien, ahora lo que estoy aprendiendo de manera rudimentaria es a apreciar las distancias en segundos de arco y a diferenciar las magnitudes entre estrellas. Todo llegará.

Como anécdota durante el transcurso de la noche vi un par de estrellas fugaces impresionantes que llamaron la atención de todo el personal y entre doble y doble charlar con algunos compañeros compartiendo inquietudes sobre los mejores refractores para la observación de dobles y otros temas muy interesantes.

Sobre las 3:30 comencé a recoger ya que tenía compromisos al día siguiente.


Una magnifica noche en compañía de gente inmejorable.

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