jueves, 23 de agosto de 2012

ACTUALIDAD ASTRONÓMICA- EL GRAN TELESCOPIO MAGALLANES

¿Qué es el telescopio gigante Magallanes?
El Telescopio Gigante Magallanes será una nueva generación de telescopios terrestres supergigantes que promete revolucionar nuestra visión y comprensión del Universo. Será operativo dentro de diez años y estará situado en Chile.


El GMT tiene un diseño único y presenta varias ventajas. Se trata de un telescopio de espejos segmentados, que emplea como elementos siete espejos rígidos monolíticos los más grandes actualmente. Seis de ellos de 8,4 metros rodean a otro situado en el eje central constituyendo una sola superficie óptica colectora de 24,5 metros. El GMT tendrá un poder de resolución 10 veces mayor que el Telescopio Espacial Hubble. El proyecto GMT constituye la labor de un distinguido consorcio internacional de las principales universidades e instituciones científicas. 
Y, ¿cómo funciona?
La luz procedente de los confines del Universo se refleja inicialmente en los siete espejos primarios y a continuación lo hace en otros siete espejos secundarios más pequeños para finalmente regresar a través del espejo primario central hacia la cámara de imágenes CCD (Charge Coupled Device, dispositivo de carga acoplada). En él, la luz concentrada es medida para determinar la distancia a la que se encuentran los cuerpos y su composición.


Los espejos GMT primarios están hechos en el Steward Observatory Mirror Lab (SOML) de Tucson, Arizona. Son una maravilla de la ingeniería moderna; cada segmento presenta una curvatura extremadamente precisa y están pulimentados con una exactitud de aproximadamente una millonésima de milímetro. Aunque los espejos del GMT constituyen una matriz mucho mayor que la de cualquier telescopio actual, el peso total del vidrio que lo integra es bastante menos de lo que cabría esperar. Esto se consigue utilizando un molde en forma de panal en el que el vidrio está totalmente hueco. El molde se coloca en el interior de un horno gigante giratorio donde se encuentra el vidrio fundido, y en la que se  le confiere la forma parabólica natural. Esto reduce enormemente el volumen de vidrio a pulir así como también reduce su peso. Finalmente, dado que los espejos gigantes son esencialmente huecos, deben ser enfriados mediante ventiladores para ayudar a igualar la temperatura de enfriamiento y de este modo minimizar las tensiones.
Uno de los aspectos de ingeniería más sofisticados del telescopio es lo que se conoce como “óptica adaptativa”. Los espejos secundarios del telescopio son realmente flexibles. Debajo de cada superficie del espejo secundario hay cientos de impulsores que ajustan constantemente el espejo para contrarrestar la turbulencia atmosférica. Estos impulsores están controlados por modernas computadoras que transforman el centelleo de las estrellas en puntos de luz fijos. De este modo el GMT ofrecerá imágenes que serán 10 veces más nítidas que las del Telescopio Espacial Hubble.
La ubicación del GMT también ofrece una ventaja clave en términos de poder ver a través de la atmósfera. Situado en uno de los lugares más altos y secos de la Tierra, el desierto de Atacama en Chile,  tendrá condiciones óptimas durante más de 300 noches/año. El Cerro de Las Campanas, lugar donde se encuentra situado el GMT, tiene una altitud de 2550 metros. Este lugar se encuentra casi totalmente desprovisto de vegetación debido a la ausencia de precipitaciones. El conjunto de número de noches claras, sus vistas, altitud, clima y vegetación, convierten a Las Campanas en un sitio ideal para el GMT.

 ¿Por qué se construyó?
La mayoría de las personas no son conscientes de que en fecha tan relativamente reciente como hace 100 años, se creía, científicos inclusive, que la Vía Láctea era todo el Universo.
La esencia de nuestra especie consiste en explorar para encontrar nuevas respuestas y nuevo sentido a lo que somos”. Pat McCarthy-Director GTM
En la década de 1920, Edwin Hubble utilizando el famoso telescopio de 100 pulgadas (2,54 metros), determinó que también existían otras galaxias. A este descubrimiento le siguió la evidencia de que el Universo se estaba expandiendo. Ambos descubrimientos revolucionaron nuestra visión del Universo. Los cielos no eran estáticos como se creía, sino que cambiaban con el transcurrir del tiempo. Al igual que el telescopio de 100 pulgadas, quizás el hecho más relevante e intrigante lo constituya el Telescopio Gigante Magallanes que realizará descubrimientos que aún no podemos ni imaginar.

Tal vez una de las preguntas más interesantes pendientes de responder sea: ¿Estamos solos en el Universo?




El Telescopio Gigante Magallanes puede ayudarnos a responder a esa cuestión. Encontrar evidencias de vida en otros planetas constituiría uno de los mayores descubrimientos en la historia de la exploración humana. Pero la toma de fotografías de los denominados “planetas extrapolares” que orbitan otras estrellas, resulta extraordinariamente difícil. Además de la enorme distancia a la que se encuentran, la estrella más cercana a nosotros está a cuatro años-luz de distancia, el otro gran problema  lo constituye el resplandor de la estrella que los alberga y que obstaculiza la mayor parte de la luz reflejada por un planeta lejano y pequeño.
Por esta razón, es por la que la gran superficie colectora de luz en el GMT resulta tan importante. Los espejos del GMT recogerán más luz que cualquier otro telescopio jamás construido y su resolución será la mejor jamás alcanzada.
Esta capacidad de recoger luz y su resolución sin precedentes contribuirá a resolver muchas otras cuestiones fascinantes de la astronomía del siglo XXI. ¿Cómo se formaron las primeras galaxias? ¿Qué son la materia y la energía oscura que integran la mayor parte de nuestro Universo? ¿Cómo surgió la materia estelar desde el Big Bang y se convirtió en lo que observamos actualmente? ¿Cuál es el destino del Universo?

Para encontrar información más detalla y objetivos científicos visite: www.gmto.org
Traducido por Pedro Díaz.

martes, 21 de agosto de 2012

ACTUALIDAD ASTRONÓMICA



A partir del jueves 23 de Agosto, ofreceremos a todos nuestros seguidores, bajo el título de Actualidad Astronómica, artículos sobre los acontecimientos que se vayan produciendo relacionados con la Astronomía,
Estas noticias serán recopiladas y traducidas de fuentes de contrastada solvencia por nuestro nuevo colaborador Pedro Díaz.
Esperamos que sean del agrado de todos.
Hasta el Jueves.

sábado, 18 de agosto de 2012

CONSTELACIONES PARA EL RECUERDO-(VI)


Rangifer Tarandus “Reno”

Pierre Charles Le Monnier, nació en Paris el día 20 de Noviembre de 1715, hijo del  matemático Pierre Lemonnier, realizó y registró su primera observación astronómica cuando contaba tan solo 16 años y poco después elaboró un mapa de la luna, cuyo trabajo le abrió las puertas de la Academia de las Ciencias de Francia, siendo admitido cuando aún no había cumplido los 21 años de edad ,el día  23 de Abril de 1736; fue a ocupar el puesto de asistente de topógrafo,  cargo que había ostentado su padre hasta el 4 de Febrero de ese mismo año.
Este nombramiento de admisión fue oficial tres días después de haber partido a las lejanas tierras de Laponia en una expedición geodésica francesa, encomendada por el Rey Luis XV y dirigidas por dos importantes,  matemáticos: Pierre Louis Maupertuis y Alexis Claude Clairault.  

El motivo de esta misión era medir la longitud de un grado de arco del meridiano lo más cercano al círculo polar ártico, para así determinar definitivamente si la Tierra era una esfera aplanada o alargada poniendo fin a la discusión sobre la forma de la Tierra, que en aquellos años tenían enfrentados  a la comunidad científica. 


Para conmemorar este viaje,  Pierre C. Lemonnier diseñó en 1743 una constelación con la figura de uno de los más característicos animales de aquella zona que había visto en su estancia en Laponia: el caribú o reno.
Rangifer era una constelación débil ya que estaba formada por estrellas de magnitudes altas entre 5 y 6. Lemonnier la colocó en el cielo del norte entre las de Cefeo y Camelopardalis (la Jirafa) y  a los pies de Casiopea.
En el año 1776  Jean Nicolás Fortin, basándose en el Atlas Coelestis confeccionado por John Flamsteed en 1729, donde se recogían los datos de las estrellas, nebulosas y cometas descubiertos hasta el año 1690, confeccionó un nuevo  Atlas rectificando y mejorando las posiciones de las estrellas que a lo largo de estos años habían cambiado y agregando en el mismo los nuevos descubrimientos. Este nuevo atlas fue realizado bajo la supervisión del propio Le Monnier y de Charles Messier incluyendo también los trabajos de F. Pasumot y Nicolas Luis de Lacaille. Como es lógico, en este Atlas aparece por primera vez la figura de la constelación del Reno.   



Como curiosidad este atlas está  escrito en francés, cuando la tradición era hacerlo en latín.


Seis años más tarde el Atlas Uranographia de Johann E. Bode de 1782 también recoge la constelación de Rangifer,  pero años más tarde en el nuevo Atlas de Bode confeccionado en 1805,  aparece la constelación del Reno acompañada por la figura de otra de las constelaciones desaparecidas como es Custos Messium (El guardián de la cosecha) de la que hablaremos en otra entrega.



Ambas constelaciones se pueden ver en el Celestial Atlas de Alexander Jamieson de 1822, y en el Urania Mirror de Richard Rouse Bloxam de 1825, donde la constelación de Rangifer está recogida con el nombre de la especie de reno Tarandus. 


Placa de A.Jamieson

Placa de Richard R. Bloxam

En una ampliación realizada por C. Flammarion en 1877  de un Atlas Celeste del astrónomo y cosmógrafo francés  Charles Dien editado en 1866, ya no aparecen estas dos constelaciones, de lo que se desprende de esta ausencia, es que posiblemente  tuvieron  poca aceptación entre sus propios paisanos.



Hasta la próxima.
Texto: Paco Tello

martes, 14 de agosto de 2012

UN PASEO POR SCUTUM


Como siempre y si la noche de observación se presenta buena, me encanta sacarle todo el jugo a una de las constelaciones  y así ocurrió esta última vez y le tocó el turno a Scutum (Escudo) la única constelación moderna asociada a una figura histórica, el rey polaco  Juan III Sobieski.

Es una constelación pequeña, la quinta en orden de menor tamaño, que es atravesada por la Vía Láctea,  y merece la pena visitarla solamente por ver un par de objetos de los nombrados clásicos, aunque ese no es mi caso, pues para mí todos los objetos son interesantes por muy débiles que sean.
Aquí os pongo las impresiones sobre la visión de algunos de ellos, en el paseo por Scutum con mi telescopio LX 90 de 12” pulgadas y con los oculares Ethos de 100º grados de campo aparente.


Comencé por NGC 6631- Cumulo abierto. Algo concentrado, medianamente brillante y de cantidad media en estrellas. De 11,7 de magnitud,  de 7 minutos de arcos y que se encuentra a una distancia de 8.480 años luz, lo observe con el ocular de 21 mm y a 147 aumentos.

NGC 6649- Cumulo abierto. Me llamo la atención por estar aislado de estrellas, dentro de la Vía Láctea. Os lo recomiendo que le echéis un vistazo. Es muy similar al NGC 6631, algo concentrado, de brillo medio y de cantidad media.  De 8,9 magnitud, 6 minutos de arcos y a 4465 años luz de distancia, para este cúmulo utilicé los Ethos de 13 mm a 234 aumentos.

NGC 6694, M26- Cumulo abierto. Muy concentrado, muy brillante y medio en estrellas. De 8 magnitud, de 10 minutos de arcos y a una distancia de 5.218 años luz. Alrededor del núcleo baja la densidad del cúmulo, probablemente oscurecido por la materia interestelar. Lo observé con el mismo ocular y aumentos del primero (NGC 6631)

NGC 6705, M11- También conocido como Pato Salvaje. Cumulo abierto. Qué os puedo decir de este cumulo que no sepáis ya,  es uno de los mejores cúmulos abiertos por no decir el mejor, por su gran concentración de estrellas, cerca de 500 y que se parece más a un cumulo cerrado. Muy concentrado, de brillo medio y muy rico en estrellas. De 5,8 magnitud, 11 minutos de arcos y a la distancia de 6120 años luz.  Las estrellas más brillantes forman un triángulo que se parece a una bandada de patos, de ahí su nombre. Probé con los oculares de 13 y 21 mm, resultando mucho mejor el de 13 mm a 234 aumentos.


NGC 6705-M11


NGC 6712- Cumulo cerrado. Disperso hacia el centro. De 8,1 magnitud, 9,8 minutos de arcos y que se halla a una distancia de 22.500 años luz. Aquí tuve que utilizar el Ethos de 8 mm y 381 aumentos.


IC 1295- Nebulosa planetaria. Difícil y fácil de localizar dependiendo del instrumento que se tenga.
Para  telescopio mediano con goto y sin filtro, es difícil de observar, pero si ponemos el filtro de OIII aparece como por arte de magia. Para los teles medianos sin goto, o sea a pulmón limpio, hay una forma muy fácil de localizarla, siempre que tengamos un campo mayor de unos 30 minutos, lo primero será localizar el cúmulo cerrado NGC 6712, a continuación ponerle el filtro de OIII y llevar el cúmulo por los extremos hasta que os salga la planetaria pues se encuentra a solo 24’ minutos de arcos de separación; si tenéis más campo lo tendréis más fácil de encontrar.
NGC 6712 y IC 1295
Esta nebulosa planetaria es ovalada e irregular de trazo anular. De 12,7 magnitud,  de 1,7x1,5minutos de arcos y se halla a la distancia de 3.600 años luz. Utilicé el ocular de 13 mm a 234 aumentos y por supuesto el filtro OIII.
Anotando observación

Saludos y hasta la próxima 
Carmelo Álvarez