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martes, 8 de noviembre de 2016

PEGASO EL CABALLO ALADO Y SUS DOBLES

Por Luís Viana


Observación del sábado 29 Octubre 2016

Poco pasaban de las 19:00 horas cuando hice acto de presencia en la Picota y ya andaban por allí Paco Tello, Carmelo, Antonio y  Paco Molina. Caras de preocupación en algunos y efectivamente Antonio tenía un serio problema con su telescopio que le obligaría más tarde a recoger con anticipación privándonos de su presencia nocturna.

Mientras montaba mi telescopio y saludo a los presentes otros fueron llegando. Alfredo, Carlos, Luis Enrique y Luis García completarían la noche que se presagiaba con algo de nubes pero que para gozo de todos no dieron señales de vida.

Con la llegada de la oscuridad y después de alinear el láser con el telescopio y como no, la correspondiente alineación del tele, comencé una vez más, por ir reconociendo algunas constelaciones para seguir fijando aún más su posición en el cielo, pero antes pasaríamos a degustar ese vinito de Paco y esos pastelitos que con tanto cariño nos hace María José.

En esta ocasión las constelaciones fueron: Capricornio, Acuario, Piscis, Aries, Hércules, Lira, Águila, Cisne, Caballito, Delfín, Flecha, Zorra, Pegaso, Andrómeda, Triángulo y las circumpolares, Jirafa, Casiopea, Cefeo y Dragón.  Más avanzada la madrugada  buscaría Auriga, Tauro con sus espectaculares Pléyades e Híades y Géminis, Liebre y Cáncer.

Pasadas las 21:00 comencé con mi particular observación de dobles esta vez en Pegaso, hasta un total de 15 dobles, además del cúmulo globular M15 de magnitud 6.
Tengo que resaltar que me quedan muchas más dobles en Pegaso que poco a poco iré resolviendo, pero de las observadas en esta ocasión me quedo con tres en concreto que me hicieron disfrutar de verdad, Pi+27 PEG, Sigma 2848 y Sigma 2857.

Mientras iba observando una y otra doble, compartía objetos y comentarios con los compañeros: Luis Enrique, Alfredo o Carlos, y por supuesto con Paco Molina que estaba de estreno con su Taka.

También Luis García con sus maravillosos binoculares iba intentando descubrir alguna doble a la par.

Agradecer a Carlos su explicación sobre como hallar el campo según los grados del ocular y los aumentos según la focal, cosas básicas, pero que por pereza y falta de práctica se me va olvidando una y otra vez. Anoté como calcularlos y creo que ya no volveré a tener problema para recordarlos.
Sobre las 2 de la mañana ya con Orión y Tauro, alzándose en el cielo, abandoné las dobles de Pegaso para hacer un repaso al conjunto de las Pléyades y algunas dobles de Orión, y por supuesto como no  a su enorme y fantástica nebulosa,  en la que estuve un buen tiempo disfrutando de su visión.

Sobre las 3 de la mañana, los 3 “luises” más Alfredo comenzamos a recoger para sobre las 3:30 salir juntos de vuelta a casa con la sensación de haber disfrutado una noche más de esta maravillosa pasión que es la astronomía.


Hasta la próxima

sábado, 5 de noviembre de 2016

UNAS HORAS BAJO UN CIELO ESTRELLADO

Por Paco Tello

La noche del 29 al 30 de Octubre, tuve la suerte de poder volver a disfrutar de unas horas bajo un cielo cuajado de estrellas en compañía de mis amigos andromedanos.
Llegue temprano a nuestro lugar de observación y allí ya  se encontraban Carmelo Álvarez, Antonio Conde y Paco Molina.

Carmelo y Antonio andaban enfrascados en un resolver un “pequeño” inconveniente en el tele de Antonio: la pieza que sujeta la diagonal porta-ocular se encontraba atorada y no había manera de hacerla girar. 
Primeros intentos

¿Gira a la izquierda o la derecha?
Lo que se llama textualmente echar una mano


El “pequeño” inconveniente, se fue haciendo más “grave”… de nada valieron las llaves allen, destornilladores planos, tenacillas, cuchillas, golpes, llamadas telefónicas,  fuerza bruta, etc… aquello no se aflojaba de ninguna manera, tanto que rendido a la evidencia, el compañero Antonio decidió dar por suspendida su observación, pasando al modo “voyeur”, es decir, miro por este tele, miro por este otro, hasta que dio por finalizada su noche.

Al grupo, mientras se ponía el Sol,  se fueron uniendo  Luis Viana, Luis Enrique, Luis García, Carlos Lozano y Alfred García. Todos intentaron aportar ideas para resolver el dichoso problema del tele. Inútil.
Solidaridad
Mientras tanto Paco Molina, andaba jugueteando en el montaje de su flamante adquisición, un taka 120 con montura SkyWatcher que le entretuvo hasta las tantas y no sé si llego a observar algo, pues cuando me despedí aún andaba enfrascado en la alineación de la Polar. ¡¡Todo llegará tocayo!!
Con la criatura en brazo
¡¡¡Pues yo no veo nada!!!
Con la noche cerrada, hice pareja con Luis García, y con sus binoculares Miyauchi nos deleitamos en recorrer varias constelaciones para observar los impresionantes objetos del cielo que nos ofrece este tiempo de otoño, haciendo parada especial en algunas dobles para comprobar hasta que separación angular permite resolver… teniendo en cuenta las magnitudes de los componentes.
Tertulia
Llegada mi hora de regreso, despedida de los compañeros y vuelta a casa con mucho cuidado, pues la carretera te da sorpresas en forma de venados que repentinamente se te cruzan.


Hasta la próxima.




lunes, 23 de enero de 2012

LA PRIMERA OBSERVACION DEL AÑO CON “CAN MAYOR” (2)

Continuación:

Relato de Juan Domingo:

Lo primero es destacar que cada vez estoy más contento con la montura.
Ayer lo que hice fue trabajar sobre una selección de objetos que previamente había sacado con el programa que nos había recomendado el amigo Jose Lumbreras, con el que seleccioné objetos del catálogo NGC con magnitud por debajo de 7 y ordenados por constelaciones.
De esta manera estuve observando en las constelaciones de Andrómeda, Auriga, Camelopardalis, Casiopea, Cefeo y Orión. De todos los objetos que observé, los que más me gustaron fueron los cúmulos abiertos, NGC 1912/M38, NGC 1960/M36 o NGC 2099/M37, los tres en Auriga. Pero destacando sobre todos los demás, con el que me quedo y que para mí es uno de los más bonitos de contemplar es NGC 1976/M42 la gran nebulosa de Orión.
Para finalizar la noche, monté la cámara en el telescopio e hice algunas fotos a Júpiter y a la misma nebulosa de Orión, que cuando las procese las subiré al blog. La verdad es que estoy contento con el resultado porque por lo menos algo ha salido.
Un saludo y hasta la próxima.

Relato de Patricio:

Llevé a cabo la puesta de largo, o sea saqué por primera vez al campo, mi nueva adquisición: un Vixen NA140SSF con el que estuve calibrando y comprobando las buenas cualidades que tiene para estrellas dobles y planetarias.
En un momento dado de la observación llamé a mis compañeros para primeramente leerles un pasaje del libro de Comellas sobre un objeto que tenía en mi ocular. Se trataba de la estrella R Leporis, o HD 31996, la gota de sangre o estrella Carmesí de Hind. La visión de esta estrella es impresionante y el nombre se ajusta a lo que ve, un sol de color rojizo característico de las estrellas de carbono, que brilla intensamente en la negrura del cielo. Nos dejó a todos comentando durante un buen rato la belleza de esta variable que se encuentra a 1.100 años luz de distancia.
R-Leporis.
Otra de las visitas al ocular de mi Vixen fue para contemplar las 6 estrellas del trapecio de Orión, que se podían ver perfectamente.
Este ha sido un breve resumen de la primera noche de observación del año que espero sean más y mejores que el año que se ha ido.
Saludos y hasta pronto.

Relato de Paco:

Como siempre un buen vino de pasa de aperitivo y de comer, pestiños, ambos de Bollullos después de montar y antes de comenzar la observación, la cual estuvo amenizada por un acompañante inesperado, un “Can Mayor” mastín leones que nos hizo pasar momentos divertidos.
Momento del acercamiento del "Can Mayor"
A pesar de que yo fui el que tuvo la feliz idea de ofrecerle comida que acepto sin disimulo, nuestro invitado, notaría las dotes de Cesar Millán (el encantador de perros) en nuestro compañero Carmelo, del que no se despegaba ni un centímetro, llegando a tenerlo acostado entre las patas del trípode con el consiguiente estorbo para observar.
Lo mejor fue cuando nuestro amigo Carmelo mantenía conversación con el “Can Mayor” rogándole que se apartara e indicándole que yo era el que le había suministrado la vianda y que me acompañara a mí. Imaginaos la situación en la oscuridad de la noche: un perrazo atigrado, acostado justo en tus pies, no dejándote mover y con el temor a un inoportuno tropezón y la consiguiente e inesperada reacción del “Can Mayor”. Fueron momentos de carcajada general. Esta es una de las muchas anécdotas que suelen suceder cuando observas en plena sierra, alejado de toda población y en mitad de la noche con gente a quien conoces y aprecias.
Bueno vamos a mi pequeña crónica: mi trabajo consistió en seguir sacando bocetos de objetos de cielo profundo con unos sencillos prismáticos para cuando llegue la hora de publicarlos en la sección del Taller de Astronomía en su parte práctica, y que toda aquella persona interesada en la misma pueda seguir esa parte con suficiente detalle.
Estos bocetos fueron de M41, Collinder 69, M44, M67, Collinder 132, NGC 1502 junto a la cascada de Kemble.
Resumen final: una bonita noche con humedad que obligaba a tener guardados los apuntes en papel, para que no terminaran empapados.
Y ahora toca esperar que el cielo de Febrero sea un poco mejor en cuanto a humedad.